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CASA MENDOZA

Este linaje fue uno de los más ilustres y destacados de la historia española. Extendiéndose por toda España y América, y creando nuevas casas nobiliarias. La Casa Mendoza tiene sus orígenes en la localidad alavesa de Mendoza, cercana a Vitoria-Gasteiz. La primera persona que utilizó el apellido Mendoza fue el nieto del nieto del Señor de Vizcaya Íñigo López (Casa de Haro). El hijo de este último nieto construyó a principios del siglo XIII la Torre de Mendoza en esta localidad. Esta dinastía gozó de la Torre de Mendoza hasta que la vendieron al vitoriano Bruno Martínez de Aragón y Echánove en 1856. En el siglo XIV abandonaron su residencia natal para servir en el reino de Castilla y en el siglo XV se instalaron definitivamente en la ciudad de Guadalajara.

La primera persona de la Casa Mendoza que paso a servir en el reino de Castilla fue Gonzalo Yáñez de Mendoza con Alfonso XI, que en aquel momento ya tenía su residencia en Guadalajara. Era un noble descendiente del Señor de Mendoza y el último nacido en Álava. Gonzalo fue el padre de Pedro González de Mendoza. Su hijo Pedro se caso en dos ocasiones. Su primer matrimonio fue con la hija de Íñigo López de Orozco, Juana de Orozco, donde no tuvieron descendencia. Su segundo matrimonio con Aldonza López de Ayala de la Casa alavesa Ayala. Aldonza era hija de los nobles y señores de Ayala Fernán Pérez de Ayala y Elvira Álvarez de Ceballos y hermana del Canciller Ayala, Pero López de Ayala. Del matrimonio con Aldonza tuvieron ocho hijos como Juana Hurtado de Mendoza, bisabuela de Fernando el Católico, o del almirante mayor de Castilla y poeta Diego Hurtado de Mendoza y Ayala. Pedro González de Mendoza (el héroe de la Batalla de Aljubarrota, Reino de Portugal, al ceder su caballo al rey Juan I para que escapase aunque fuese muerto allí) fue el abuelo del I marqués de Santillana, fruto del matrimonio de su hijo Diego Hurtado de Mendoza y Leonor de la Vega. Que a su vez su hijo Diego fue abuelo del I duque del Infantado y II marqués de Santillana, como del I conde de Tendilla o del Cardenal Mendoza.

Uno de los momentos importantes de esta dinastía es cuando tras dieciséis años de apoyo al reinado de Pedro I (Pedro el Cruel), Pedro González de Mendoza (hijo de Gonzalo Yáñez de Mendoza), su tío Íñigo López de Orozco y otras familias alavesas reconocieron como rey al hermanastro de Pedro, Enrique II de Trastámara en 1366. Pero el más importante y el que hicieron enriquecerse y hacerles una de las dinastías más ricas, importante e influyentes con títulos nobiliarios y puestos importantes en toda Castilla fue cuando en 1474 los Mendoza apoyaron a la futura reina de Castilla Isabel I en detrimento de la princesa Juana, hija del rey de Castilla Enrique IV.

Uno de los personajes más destacados e importantes de los Mendoza sin tener título nobiliario fue el Cardenal Mendoza. Este noble eclesiástico, político y militar fue Pedro González de Mendoza y Suárez de Figueroa. Fue el sexto hijo del I marqués de Santillana y I conde del Real de Manzanares, el militar y poeta Íñigo López de Mendoza y de la Vega y su esposa Catalina Suárez de Figueroa y Orozco. El Cardenal Mendoza, también recordado por el titulo de Cardenal de España. Ostento los puestos de Obispo de Calahorra y la Calzada, puesto otorgado por el rey de Castilla Juan II. También ocupó los puestos de Obispo de Sigüenza hasta su fallecimiento en 1495, administrador apostólico de la Archidiócesis de Sevilla, Obispo de Osma y Arzobispo de Toledo hasta su muerte. El papa Sixto IV nombró a Pedro González de Mendoza y Suárez Figueroa, en 1482, Arzobispo de Toledo sucediendo a Alfonso Carrillo de Acuña y tras su fallecimiento en 1495 le sucedió el cardenal Cisneros. También este mismo papa y en el mismo año le nombro cardenal con el titulo romano de Santa María in Dominica y él se la cambio por la adoración a la de Santa Cruz. El Cardenal Mendoza realizó servicios tanto en la corte del rey Juan II, Enrique IV y en la de los Reyes Católicos como en la Guerra de Sucesión Castellana, apoyando a la futura reina Isabel I de Castilla contra los partidarios de Juana. Gracias a sus servicios consiguió enriquecerse él y los suyos, consiguió importantes títulos para su familia.

 

Muchos fueron los títulos nobiliarios salidos de la Casa Mendoza o de los emparejamientos con otras dinastías, pero los más importantes son el Duque del Infantado y el Marqués de Santillana. Algunos de estos títulos son:

Marquesado de Santillana y Condado del Real de Manzanares

Títulos nobiliarios concedidos en por el rey de Castilla Juan II en 1445 al militar y poeta Íñigo López de Mendoza y de la Vega (Carrión de los Condes, Palencia, en 1398 – Salamanca en 1458), tras su presencia en la batalla de Olmedo de 1445. El Marquesado se refiere al municipio cántabro de Santillana del Mar y el Condado se encuentra en la actual Comunidad de Madrid. Los padres del I marqués de Santillana y I conde del Real de Manzanares eran el almirante mayor de Castilla y poeta Diego Hurtado de Mendoza y Ayala y Leonor Lasso de la Vega. Se casó con Catalina Suárez de Figueroa y Orozco donde tuvieron diez hijos como el I Duque del Infantado, el Cardenal Mendoza o el I conde de Tendilla.

Ducado del Infantado

Título nobiliario concedido el 22 de julio de 1475 por los Reyes Católicos a Diego Hurtado de Mendoza y Suárez Figueroa primogénito del I marqués de Santillana y Catalina Suárez de Figueroa y Orozco. El I duque del Infantado y II marqués de Santillana fue también hermano, entre otros, del Cardenal Mendoza o del conde de Tencdilla. El sucesor al título como II duque del Infantado y III marqués de Santillana fue su primer hijo Íñigo López de Mendoza y Luna, fruto de su primer matrimonio con María de Luna (hija de Álvaro de Luna, vinculándose así con la familia de Luna). El Ducado del Infantado ostenta la de Grande de España de primer nivel desde 1520.

Condado de Tendilla

Título Nobiliario otorgado por el rey de Castilla Enrique IV en 1468 a Íñigo López de Mendoza y Suárez de Figueroa. El I conde de Tendilla era el segundo hijo del I duque de Santillana y hermano, entre otros, del I duque del Infantado y del Cardenal Mendoza.

Marquesado de Mondéjar

Título nobiliario concedido a Íñigo López de Mendoza y Quiñones por Juana la Loca en 1512. Era hijo del I conde de Tendilla y Elvira de Quiñones, hermano del arzobispo de Palencia y de Sevilla, Diego Hurtado de Mendoza y Quiñones, nieto del poeta y militar Íñigo López de Mendoza y de la Vega, I marqués de Santillana y I conde real de Manzanares y sobrino, entre otros, del I marqués del Infantado y del Cardenal Mendoza. El II conde de Tendilla y I marqués de Móndejar fue conocido como el Gran Tendilla.

Condado de SaldaÑa

Título nobiliario creado el 22 de julio de 1479 por los Reyes Católicos a favor del heredero del I duque del Infantado. El I conde de Saldaña fue Juan López de Mendoza, hijo mayor y heredero del I duque del Infantado. Al morir Juan joven, dejó a su hermano Íñigo López de Mendoza y Luna como II conde de Saldaña y más tarde sería II duque del Infantado.

Condado de la CoruÑa

Título nobiliario concedido por los Reyes Católicos a Lorenzo Suárez de Mendoza y Figueroa como I conde de la Coruña. Era el quinto hijo del I marqués de Santillana, nieto del almirante mayor de Castilla y poeta Diego Hurtado de Mendoza y Ayala y hermano, entre otros, del I duque del Infantado, I conde de Tendilla y del Cardenal Mendoza.

Condado del Cid

Título nobiliario concedido por los Reyes Católicos en 1492 a Rodrigo Díaz de Vivar y Mendoza, hijo mayor del Cardenal Mendoza y de Mencía de Lemos. En este mismo año, los Reyes Católicos le nombraron I conde del Cid junto al I marqués de Cenete. Su hija y heredera al título contrajo matrimonio con el heredero de duque del Infantado, donde así consiguieron unir los títulos a la casa Mendoza.

Marquesado del Cenete

Título nobiliario concedido en 1492 por los Reyes Católicos a Rodrigo Díaz de Vivar y Mendoza como I marqués de Cenete, donde también le nombraron I conde del Cid. Fue el primer hijo del cardenal Mendoza, nieto del I marqués de Santillana, hermano del I conde de Mélito y sobrino del I duque del Infantado y del II marqués de Santillana o de I conde de Tendilla.

Condado de MÉlito

Título nobiliario otorgado al hijo del Cardenal Mendoza y hermano del I marqués del Cenete y I conde del Cid, Diego Hurtado de Mendoza y Lemos.

Ducado de Francavilla y Principado de MÉlito

El primer Mendoza que ostentó los títulos de duque de Francavilla y Príncipe de Mélito fue Diego Hurtado de Mendoza y de la Cerda, hijo Diego Hurtado de Mendoza y Lemos (I conde de Mélito) y Ana de la Cerda y Castro, nieto del Cardenal Mendoza y sobrino I marqués del Cenete y I conde del Cid.

Principado de Éboli

Título nobiliario otorgado en 1559 por Felipe II a Ana de Mendoza de la Cerda y a su marido Ruy Gómez de Silva. Ana era nieta del I conde de Mélito y hija de Diego Hurtado de Mendoza y de la Cerda, duque de Francavillla y príncipe de Mélito, y de Catalina de Silva. Tras su matrimonio ostento los títulos duquesa de Pastrana y I princesa de Éboli.

El Condado de Alba de Tormes

Este título fue concedido en 1438 por el rey de Castilla Juan II al primo de Íñigo López de Mendoza, Fernando Álvarez de Toledo y Sarmiento y que ya ostentaba el titulo como II señor de la localidad cercana a Salamanca, Alba de Tormes. Señorío que fue otorgado en 1429 por Juan II a su tío Gutierre Álvarez de Toledo. El título se elevo a ducado cuando el hijo de Fernando Álvarez de Toledo, García Álvarez de Toledo y Carrillo de Toledo, obtuvo el título de I duque de Alba de Tormes concedido por el rey de Castilla Enrique IV en 1472. Aunque este título no desciende directamente de la Casa Mendoza, fue concedido a un pariente de los Mendoza. Su origen se encuentra en la Casa de Toledo, aunque con el tiempo se han añadido dos casas nobiliarias más.

Condado de feria

Título nobiliario concedido a favor Lorenzo II Suárez de Figueroa. Aunque este título no desciende directamente de la Casa Mendoza, salió a favor del hijo del matrimonio del I Señor de Feria, Gómez Suárez de Figueroa, y de su esposa Elvira Laso de Mendoza. Elvira era la hija del almirante mayor de castilla Diego Hurtado de Mendoza y Leonor de la Vega, nieta de Pedro González de Mendoza (el héroe de Aljubarrota) y hermana, entre otros, de I marqués de Santillana y I conde del Real de Manzanares.